Me siento agradecida y bendecida, porque representar a Cayey es un sueño hecho realidad. Tengo un amor profundo por mi pueblo; aquí crecí y me formé. Cayey me brindó la oportunidad de descubrir mi pasión por las artes. Desde mi niñez, las brumas mañaneras me abrazan y me conectan con el carisma de mi gente. Con mi participación en esta edición de MUPR, deseo reflejar a la mujer en su esencia. Una mujer capaz de sobrepasar sus límites y lograr lo que en algún momento pensó que era inalcanzable. Una mujer que reconoce sus emociones y las redirige para reescribir su historia. Es la fuerza de bien que contagia de poderío a los demás y toma de la mano a las mujeres que le rodean. Porque para todas, hay estrellas.


Una noche especial para nuestras candidatas y auspiciadores del certamen
Las candidatas de Miss Universe Puerto Rico desde